Jardín infantil: La utilidad de usar un objeto transicional

Se acaban los días de libertad para los pre escolares también. La entrada de los niños y niñas al jardín no es una tarea fácil.

Algunos niños irán al jardín por primera vez, otros dejarán las vacaciones para volver a ver a sus amigos y tías.

De una u otra forma siempre es difícil el ingreso a clases. Intentamos ser lo más respetuosas posibles sin colapsar con el peso de marzo, mientras motivamos a adherir a la rutina.

La escolarización y los padres

El proceso Pre escolar es cada vez más anhelado por la necesidad de los padres y madres de inscribir en los colegios de su preferencia.

Los procesos de admisión en los colegios se hacen muchas veces, a los 2 años de edad, para ingresar al nivel medio mayor. Algo impensado en antaño al que nos estamos adaptando también nosotras que no estamos acostumbradas como madres.

La escolaridad comienza en el jardín infantil

Es el comienzo de una de la etapa más largas de sus vidas, 20 años aproximados de escolarización.

El casi ese constituye un proceso muy importante en sus vidas, marcando el comienzo de la etapa escolar que desarrollarán por cerca de 20 años.

Ayudar a los niños con un objeto facilitador

En nuestro caso, el proceso de adaptación fue muy difícil, nos costó mucho (el año pasado) que se acostumbrara al jardín, hoy va feliz. Pero marzo siempre es difícil. Logramos que llevara una pulsera de la mamá (tipo cuerito) para que se sintiera más cerca mío y su mamadera regalona.

Ama una mamadera marca MAM, que es la más grande que encontré (de 330ml). Está diseñada para bebés sobre 4 meses, cuando la lactancia está consolidada. Sin embargo, mi hija la probo al año y la amó.

El objeto transicional para los niños

Un objeto transicional, es cualquier objeto al que el niño recurre para sentirse como en casa, casi siempre es un objeto blandito con olor a mamá. El chupete de la mamadera cumple con esas características.

El objeto tradicional es un espacio entre la mamá y el bebé. Un espacio yo/noyo que hace que el bebé se sienta seguro cuando está separado.

Así como la “mantita” de Linus en la serie de dibujos Penuts. Todos los niños tienen un objeto transicional. Es normal y fundamentalmente necesario. A algunos les cuesta más que a otros dejarlo de lado.

En mi caso, como madre, entiendo que es funcional, que le hace bien. Ama chupar el chupete de la mamadera que es una tetina ancha, que en general les encanta a los niños.

Logré que también optara por el chupete, que también es marca MAM (para poder lavar la mamadera y esterilizarla de vez en cuando).

El chupete, que también debe usarse una vez que la lactancia esté consolidada, parte desde el modelo Start que viene en látex o silicona. Lo mejor de todo es que tiene una versión noche que es el mismo pero brilla en la oscuridad (imperdible). Está en distintos tamaños según edad.

Pueden ver todos esos productos en la cuenta de Instagram de MAM accesorios.

¿Qué objetos transicionales son los más populares?

Ya mencionábamos la mantita de Linus, probablemente el objeto transicional más reconocible. Para esto no hay reglas, por lo que no es raro encontrar que diferentes objetos puedan cumplir esta finalidad.

Por ejemplo algunos de los más populares son:

• Mantas.
• Cojines.
• Animales de peluche.
• Un juguete favorito.

Habitualmente estos objetos además tienen un nombre o apodo que se les da.

¿Tus niños tienen algún objeto transicional que puedas identificar?

Equipo SuperMadre