Maternidad y puerperio

Por Paula Bórquez

Antes de ser madre, jamás en la vida había oído hablar de esta palabra,” el puerperio”, por lo que podríamos decir que muchas veces es el gran olvidado de todo este proceso de gestar, parir y criar.

Tradicionalmente, el puerperio se ha asociado a la cuarentena, una etapa de recuperación física del parto, por lo que se define como la etapa desde que es expulsada la placenta hasta que el útero y el resto del aparato reproductor femenino se recupera posterior al parto; es decir, cuando se habla de puerperio, se suele hacer referencia solo a los cambios físicos y fisiológicos.

Sin embargo, el puerperio abarca un periodo mucho más largo, como mínimo el primer año de vida del bebé, o incluso más, algunos autores hablan que podría extenderse hasta los 3 años de vida de nuestros hijos e hijas y hace referencia también a los aspectos emocionales, psicológicos y sociales que se dan en la etapa de posparto.

ETAPAS DEL PUERPERIO

• PUERPERIO INMEDIATO: Comprende las primeras 24 horas de vida del bebé.
• PUERPERIO TEMPRANO: Comprende del segundo al séptimo día de vida del bebé.
• PUERPERIO AMPLIADO: Comprende desde el octavo al cuarenta día de vida.
• PUERPERIO EMOCIONAL: Desde el día 40 hasta el fin de la fusión emocional

Entonces podríamos decir que el puerperio es un proceso de adaptación, tanto fisiológica como psicológica, donde la mujer que acaba de dar a luz tiene que acostumbrarse a una nueva etapa en la que ya no está embarazada pero tampoco es la misma que era antes de embarazarse.  Y puerperar podría definirse como la acción sostenedora que lleva a cabo la madre que acaba de traer al mundo a su hijo durante los primeros años de vida, consistente en cuidarla fisiológica y emocionalmente, fusionándose con ella y atravesando así mismo su propia transformación de mujer a mujer madre.

Existen tantos aspectos psicológicos que rodean esta etapa a veces descuidada o incluso desconocida. que algunos hablan de puerperio psicológico en sí mismo.

Así, el puerperio psicológico no es más que todo el proceso psicoemocional que debe atravesar la madre para redescubrirse a sí misma, transformarse y encontrarse emocionalmente con su bebé. Tener un bebé transforma la vida, la rutina y por supuesto el cuerpo de una mujer.

Los cambios que se producen durante el embarazo son muchísimos. Físicamente estos cambios, según señalan los obstetras, se van a revertir en un periodo de tiempo más breve, seis semanas aproximadamente, pero hay otros cambios más profundos, sobre todo a nivel emocional. Muchas veces no es fácil aceptar y transitar estos cambios en una sociedad que nos empuja a seguir como si no hubiese pasado nada, que nos obliga a mantener unos ritmos acelerados incompatibles con poder atravesar el postparto de forma saludable.

PUERPERIO EMOCIONAL

En el posparto o puerperio existe una realidad emocional cambiante en la mujer que ha gestado y parido de la que es necesario hablar.  Y es que a nivel psíquico la mujer se transforma , muchas madres hablan de la experiencia transcendental que es para ellas el haber creado vida y haberla parido. No es extraño por ejemplo que la mujer puérpera  se sienta  distinta, quizá agotada por lo que sucedió durante el parto, o empoderada por lo que fue capaz de hacer, pero en cualquier caso diferente a antes de atravesar esta experiencia de gran trascendencia en su vida.

“Hay un cambio, la mujer que se ha convertido en madre, es otra, grande, poderosa, extraña, rota, agotada, triste, puérpera”. Además de todo esto, además el campo emocional de la madre ya no es único, esta fusionado con el de su bebé desde hace meses y después del parto sucede el primer encuentro entre ellos, la diada conformada por la madre y su bebe se reconoce por fin tras meses de gestación y convivencia. Además, la lactancia, supondrá una continuación de la unión que se inició en el útero afianzando más aún esa fusión de se extenderá alrededor de los tres años. cuando las madres sienten realmente que sus hijos dejaron de ser los bebés que sostenían, proceso que generalmente coincide con el destete, ingreso al jardín o vuelta al trabajo de la madre.

Durante este periodo se produce un proceso de vinculación y adaptación en la diada, en el que sintonizar con tu bebé y conocerlo en profundidad te llevará tiempo. Aprender a descifrar el llanto, cuándo darle de comer o saber de qué manera y cómo dormirlo será un desafío al que te tendrás que enfrentar. Este proceso de vinculación requiere tiempo. Si a esto le agregas que la vida continúa y hay que realizar las tareas domésticas, recibir visitas que quieren conocer a tu bebe, cuidar a los hijos mayores o volver a trabajar, es comprensible que la mayor parte de las mujeres experimenten sensaciones de tristeza o se sientan psicológicamente desbordadas.

Una nueva definición

La definición de posparto actual resulta en cierto modo reduccionista, es importante reivindicar que el puerperio o posparto es una etapa que va más allá de los cuarenta días. Además, es un período no solamente caracterizado por lo fisiológico, sino por todo el movimiento emocional que supone convertirse en madre.  Con esta mirada ampliada desde lo perinatal se hace necesaria una nueva definición de puerperio.

Así podemos afirmar quese trata de una etapa en la vida de la mujer madre que va desde que esta da a luz a su bebe y afianza la fusión emocional con ella, hasta que su bebé sale de su esfera emocional comenzando una experiencia vivencial más autónoma, generalmente este momento está influido por el destete fisiológico, el cual marca una clara diferenciación de la díada mamá bebé.

Sin embargo, el compartir la misma esfera y por tanto permanecer en esta fusión emocional acontece también en madres que no dan el pecho o que su lactancia es más corta, puesto que es la madre el lugar seguro del bebé y su hábitat, además existen otras maneras de afianzar el vínculo, tales como el porteo, el colecho, los masajes, estar piel con piel o sostener cerca al bebé la mayor parte del tiempo de tal manera que pareciera que seguimos gestándole, aun cuando ya nació. Es lo que conocemos por el nombre de exterogestación.

Maternar en colectivo

En una sociedad individualista maternar también lo es. Por lo que es muy importante validar la necesidad de maternar en colectivo, de transitar el posparto con otras mujeres en el mismo momento del ciclo vital. O al menos que lo entiendan. “La sociedad muchas veces no cuida a las madres. Por eso es muy importante que te cuides tú y que te rodeas de otras madres, que te aporten, tranquilidad y confianza; que te rodeas de otras mujeres que te ayuden y sostengan.

El puerperio es un momento vital tan importante y trascendental en la vida de una mujer que es importante abordarlo a conciencia, con apoyo y seguridad. Asencion Gómez en su libro puérpera perdida señala que “el puerperio no acaba nunca, sino que vamos siendo puérperas menos intensas con el paso de los años, porque si el objetivo es volver al estado de antes del embarazo, eso no sucede nunca; tu cerebro nunca será como antes, tu cuerpo nunca será como antes y tu vida nunca será como antes. Es diferente”.

Paula Andrea Bórquez Torres es de Punta Arenas, psicopedagoga, diplomada en el área social y comunitaria, madre y asesora de lactancia de Lactamed Chile. Trabaja actualmente en un programa de salud mental escolar y está cursando dos diplomados: uno de crianza respetuosa y buenos tratos para la niñez, y otro de estimulación temprana. La encuentras en Instagram como @pau.borquezt (Maternidad, crianza respetuosa y lactancia).