La displasia de caderas consiste en que la cabeza del fémur no encaja de forma adecuada a la pelvis, lo cual debe ser corregido de forma prioritaria, para esto se debe considerar chequear precozmente a través de radiografía o ecografía, así comenzar tratamiento.
Existen diversos tipos de tratamiento dependiendo la gravedad de la displasia y la orientación médica de quien trate dicha patología. Podemos encontrar correas de Pavlik, cojín de Freikja o el calzón de Van Rosen o incluso cirugía
TIPS PARA UN LACTANTE CON DISPLASIA
- Es importante que tu círculo más cercano tenga conocimiento de lo complejo que puede ser regular las correas de tu hijo/a sin autorización, el ajuste de correas debe ser progresivo y bajo la supervisión y orden del traumatólogo tratante.
- Si existe antecedentes hereditarios de problemas de displasia, luxación o subluxación de cadera, debes realizar el examen de forma precoz, idealmente al mes de nacer, mediante radiografía o ecografía según sugiera el especialista.
- Si usualmente se posiciona al dormir de lado, puedes poner un cojín entre sus piernas evitando que se mantengan cerradas y así mantener la apertura necesaria.
- A la hora de dormir, si aún se alimenta de leche materna, adopta una posición de lado y recuéstalo/a junto a ti logrando que pueda continuar durmiendo de espaldas con sus piernas abiertas.
- Para que el roce de las correas no sea molesto a la altura de los hombros, confecciona o utiliza algo que simule hombreras y pueda ser menos molesto a la hora de dormir o jugar.
- El porteo ergonómico (www.ergobaby.cl) es de muchísima ayuda, se sienten seguros en este nuevo proceso de adaptación, mantiene sus caderas amplias y piernas separadas y mantienen una posición cómoda y de apego.
- Las correas deben ser utilizadas las 24 horas del día, sin embargo al tomar un baño, se sugiere otorgar 15-20 minutos y dejarlos en libertad de acción un momento, logrando experimentar lo que les dificulta con el tratamiento.
- Al cargar a tu guagua procura sostenerlo sobre tu cadera, a un costado de ella, permitiendo una mayor comodidad tanto para ti como para él/ella.
- La constancia en este tipo de tratamientos es fundamental, sólo mediante la constancia y compromiso con el tratamiento se logrará ver los resultados esperados.
- Este punto es el más importante, tu bebé necesita de ti siempre, pero en este proceso más que nunca necesita de amor, paciencia y comprensión, ayúdalo a poder adaptarse a esta nueva postura, está en tus manos su pronta rehabilitación.
Constanza Morales