Los juguetes son los objetos que más cerca de los niños están. Claramente buscamos lo mejor para ellos y nos quedamos tranquilas cuando están jugando, son minutos en los que sabemos están “a salvo”, su creatividad y ellos. Podemos acompañar y mirar desde lejos, es increíble todo lo que desarrollan jugando.
Lo digo siempre y me encanta, el juego de los niños tienen tanta seriedad como el trabajo de algunos adultos. Y debe ser tratado de la misma manera: respetando ele espacio de juego, intentando no interrumpir a menos que sea para unirnos y entendiendo que el lenguaje del juego es una producción tan importante del niño que es saludable que juegue, juegue y juegue.
Siempre estoy buscando nuevos usos para los juguetes convencionales, nuevos usos que permitan re vivir la relaciono con un objeto, sacarle partido a lo que se puede hacer con éste o enseñar/ejercitar alguna habilidad con un juguete en especifico.
Hoy fue el turno del Sr. Cara de Papa. ¿Veamos lo que hicimos con él?
El Señor Cara de Papa es solo un integrante de la familia Papa, también está la Sra cabeza de Papa con la que también puede hacerse este ejercicio de exploración de las emociones.
La característica principal de este juguete, es que los niños aprenden a posicionar las distintas partes del cuerpo en el espacio y en su lugar, ejercitando también el lenguaje al nombrar cada parte. Luego que aprenden a poner cada parte en su lugar y nombrarla, disfrutan armando caras con 4 ojos, más brazos y ahí el Sr. cara de papa cobra vida propia y características increíbles. Incluso están sus versiones superheroes.
Lo que les quiero proponer es un juego con el Sr Cara de papa que sirve para que los niños aprendan de empatía, así es que si tienes un cara de papa guardado, desempólvalo y practica este ejercicio:
¿Por qué entrenar la empatía? Enseñarle a los niños a ponerse en el lugar de otro es una habilidad que no todos tienen de manera innata. A algunos les resulta más fácil y a otros hay que ayudarlos. Es importante que los niños desarrollen empatía porque serán capaces de leer las emociones en la cara de la otra persona y podrán anteponerse a su reacción.
Por ejemplo: si estoy conversando con una persona y comienzo a hablarle de alguna situación especifica, soy capaz de darme cuenta si esto le da pena. Al darme cuenta puedo modular mi conducta para evitar que el otro se sienta mal. Lo mismo pasa con los niños, si leo el sentimiento en la cara de mi compañero de curso, al verlo enojado me iré, si veo que se pone triste con algo que le digo le pido disculpas y así… enseñamos a sintonizar con otro, lo cual es un pilar fundamental en las habilidades sociales.
Entonces lo intuiste, vamos a poner distintas caras con el Sr. Cara de Papa y le enseñaré cómo se llama la emoción ¿Tiene pena? ¿Qué le paso??Cómo lo ayudamos?¿Tiene hambre?¿Qué necesita? para finalmente extrapolarlo a las relaciones humanas. ¿Pon cara contenta?¿Y de pena? ¿Qué cara tengo?¿Qué me pasa?
Este sencillo juego, además de ser entretenido para los niños, un desafío para nosotras y desarrollador de vinculo, te ayudará a desarrollar desde pequeño la empatía. Sirve desde niños muy pequeños, hasta pre escolares. Incluso para niños más grandes con dificultades en esta área.
¿Tienes alguna otra idea que puedas desarrollar con nuestro Sr Cara de Papa?
Nosotras hicimos el ejercicio con el tarro @playskool que contiene muchas partes distintas, ojos diferentes y el señor cara de papa en su interior.
Varinia Signorelli