“Abrazando el Futuro”, es el lema de este año 2020 para celebrar la Semana Internacional de la Crianza en Brazos, donde se busca promover y defender los beneficios del porteo tanto para los bebés como para los padres y/o cuidadores. Y así desmitificar frases como “si lo cargas mucho en brazos será un niño mimado”, “no te dejará hacer nada”, “solo va a querer estar contigo y no sabrá valerse por si solo” entre tantos otros comentarios, que en la actualidad deben ir desapareciendo de nuestro vocabulario.
El abrazar a un bebé o niño tiene grandes beneficios, tanto para el que los recibe como para el que los da. Un estudio científico mostró que los niños de seis semanas de edad que eran llevados durante tres horas diarias dentro de un portabebés de tela lloraban un 43% menos que otros. Los autores de otra investigación relacionada con el tema señalaron que “puede haber una relación entre el aumento del contacto físico, que logra el uso temprano de un portabebés blando, y la seguridad del apego entre el niño y su madre o padre”.
Razones más que suficiente para promover esta acción durante la Semana de la Crianza en Brazos, ¿o no?
Por esto es que la Norma General Técnica para la Atención Integral del Recién Nacido en la Unidad de Puerperio en Servicios de Obstetricia y Ginecología de Chile, insta el apego desde el nacimiento del bebé. “El proceso de vinculación de apego se desarrolla a través de las competencias de la madre y el RN que es imprescindible conocerlas para promoverlas durante la estadía de la madre en la Unidad de Puerperio. El bebé dispone desde el nacimiento de competencias sensoriales e interactivas para vincularse y promover conductas de maternaje, así, los primeros 40-60 minutos de vida el RN permanece despierto en vigilia calma, ávido sensorialmente buscando ser acogido en el pecho materno que le brinda afecto y nutrición”.
Una vez que los bebés están más crecidos y comienzan a tener mayor interacción con el mundo, llevarlos en un portador los ayuda a observar y recibir otros estímulos que su cerebro logra absorber, debido a que tienen mayor visibilidad que en el coche. A su vez se reduce el riesgo de que padezca plagiocefalia postural, que consiste en la deformación que sufre el cráneo cuando los bebés pasan mucho tiempo acostados o en la misma postura.
Para esto, existen distintos portabebés que facilitan la crianza en brazos. Pero es importante que te informes bien cuál es el mejor para tu bebé, ya que el objetivo de estos productos es que queden en una posición cómoda y segura para un correcto desarrollo.
A continuación enumero los siguientes beneficios que tiene llevar en brazo a los bebés:
- Ayuda al vínculo afectivo entre el bebé y el cuidador que lo portea.
- Favorece la lactancia materna.
- Alivia los cólicos del lactante junto con la disminución de reflujo, gracias al movimiento que realiza la persona que lo traslada.
- El niño tiende a dormir mejor y por mayor periodo de tiempo.
- Los llantos disminuyen considerablemente al estar en contacto con su madre o padre.
- Portearlo, también trae beneficios de dejar al cuidador con las manos libres sin tener que separarlo del bebé y el contacto piel con piel.
Laura Marambio Gómez
Licenciada en Comunicación Social, Periodista Digital