El trabajo de parto es algo que se hace en equipo, tú y tu bebé están en sintonía esforzándose y dando todo de sí para el mismo objetivo: encontrarse por vez primera.
Siempre se habla de las emociones y del proceso que vive la madre a medida que las contracciones van avanzando, pero ¿qué le sucede a esa guagua en su camino a nacer?
Las hormonas en el cuerpo de la madre van cambiando, por lo que eso también va modificando a nuestra guagua, ayudando en este proceso.
Las primeras contracciones
Las primeras contracciones, empiezan suaves y distantes en el tiempo. Gracias a la oxitocina que tu cuerpo produce, el útero se contrae y lo oprime, pero tranquila que no le hace daño.
Cuando tú sientes alguna emoción, tu hijo las percibe como sensaciones, ya sea de satisfacción o de desagrado. En ese primer momento se recomienda relajarte y dedicarte a ti, así vivirás el trabajo de parto más tranquila y con menos molestias, transmitiéndole esa sensación a tu hijo o hija.
Bajada por el canal del parto
La fuerza que sienten al bajar por el canal del parto es muchísima, unos 18 Kg. aprox. Su corazón empieza a bombear más fuerte, así llega más oxígeno a través de la placenta y al nacer podrá respirar sin problemas. Además, al tener menos espacio que en el útero, su cerebro termina por liberar neurotransmisores esenciales para su desarrollo. Y por último, gracias a las catecolaminas, sus pulmones se limpian para comenzar a respirar en un ambiente gaseoso.
Después de nacer
Todo el trabajo de parto le proporciona un estrés beneficioso a tu hijo, otorgándole adrenalina en la última instancia y es por esto que nace en un estado de alerta tranquilo. Esto quiere decir que, en las primeras horas de nacido, está absorbiendo todo los estímulos a su alrededor, pero de una manera muy tranquila.
Estos momentos son esenciales para aprovecharlo con sus padres estando piel con piel e iniciando el primer contacto con la lactancia. Como los primeros días duermen la mayoría del día, es este momento en el que estará más despierto que las próximas semanas, por eso es una excelente oportunidad para comenzar con la alimentación.
También tiene altos niveles de oxitocina en su cuerpo, la hormona del amor. Es la encargada de las relaciones sociales con los demás y es la protagonista en el parto. Al tener este primer contacto con sus padres, marca una huella de como relacionarse con su entorno de aquí en adelante.
Como notaron, la guagua pasa por distintos procesos, por lo que luego de pasar por ese estado de alerta tranquilo, necesita descansar al igual que sus padres. En las primeras horas y ojalá días descansen y limiten las visitas a personas muy cercanas.
María Jesús Leturia I.
Doula
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