A propósito del programa de Canal 13 “En su propia trampa”, queremos analizar que pasa con los niños y su vulnerabilidad en las redes sociales.
Durante esta semana se ha puesto sobre la mesa, en los medios de comunicación chilenos, el peligro al que están expuestos niños y jóvenes que utilizan las redes sociales. Esta relevancia que ha adquirido el tema, tiene que ver con que un programa de televisión desenmascara a un acosador virtual, de una niña de 13 años, el cual en su vida real trabaja sistemáticamente con este grupo etario.
Es natural que nos genere preocupación y alarma, pero lamentablemente este tema es relevante hace muchos años, casi desde que apareció la internet y desde que proliferan las redes sociales. Si bien ahora ha aumentado el numero de casos, debido al mayor acceso a obtener un dispositivo con internet, es un tipo de abuso que existe hace mucho tiempo: se llama grooming.
El grooming es uno de los tantos peligros a los que están expuestos nuestros niños cuando les proporcionamos la posibilidad de conectarse a internet, sin embargo la idea no es demonizar las redes sociales sino entender qué implica el uso de éstas y como es que quedamos expuestos, adultos y niños, cuando las usamos. Tomando conciencia podremos transmitir a los niños los resguardos necesarios para blindarse y moverse con seguridad.
Es importante que reflexionemos que las personas que buscan acosar a niñas y niños, sexualmente mediante internet, son muchas y existen, están ahí dando vuelta esperando a su víctima y la esperan en los lugares virtuales que concurren. Es fácil para un acosador dar con su víctima ya que existen páginas, redes sociales y juegos que reúnen a niñas y niños y generalmente se hacen pasar por uno de ellos, con el fin de ganarse la confianza.
¿Qué hacer?
Es recomendable que podamos saber qué es lo que hacen nuestros niños en internet, que conozcamos sus conductas virtuales y podamos orientarlos. De la misma manera es recomendable que sepamos los alcances que tiene el dispositivo que compramos: si les regalamos el ultimo modelo de teléfono 4G va a tener la posibilidad de navegar sin límites. El mayor peligro de estos dispositivos es que nuestros niños y niñas navegan en soledad.
Siempre escuchamos que lo importante es supervisar, sin embargo es adecuado poner énfasis en la compañía: una vez que un niño/a comienza a tener acceso a internet, es buena idea que naveguemos juntos, en compañía y que evitemos usar los dispositivos a internet como niñera o reemplazo del contacto con un adulto responsable.
La analogía la conocemos: dejar a un niño solo en internet es como dejarlo solo en la calle. Por lo tanto, el llamado es a ser conscientes que el peligro existe, informar a los niños (la desinformación los hace más vulnerables, háblele con la verdad) de los peligros que corre y explicarle cuales son los resguardos que debe tener y las señales a las que debe estar atento.
De la misma manera se recomienda el uso de corta fuegos para evitar acceso a páginas, la utilización del ordenador fuera de los dormitorios y la comunicación fluida y constante con nuestros pequeños. Cuando están expuestos a conductas de acoso, generalmente son incapaces de pedir ayuda por el miedo que tienen, pero como padres podemos observar síntomas en otras áreas de su despliegue diario: el llamado es a acercarnos a los niños y niñas, detectar cambios en su conducta o cambios en sus ritmos Biológicos y podamos prestar ayuda frente a dificultades que pueden ir apareciendo.
Así como en el mundo virtual existe abuso hacia nuestros niños, existe también en el mundo real. No podemos taparnos los ojos. Debemos tener conciencia que acompañar a los niños, escucharlos, darle tiempo, palabras y miradas, será siempre un factor protector. Cabe destacar la importancia de aunar criterios con otros padres, a cargo de los amigos de nuestros hijos: así poder estar tranquilos y seguros que nuestros hijos/as, en casa de sus amigos y amigas, estarán seguros en lo virtual.
Varinia Signorelli C.