El corte del cordón umbilical se ha ganado un puesto alto en los partos ya que es una de las maneras de que el padre participe activamente en el nacimiento de su guagua.
Pero no siempre se habla de cuando cortarlo: ¿hay alguna diferencia entre esperar o hacerlo inmediatamente?
La diferencia no es de vida o muerte, sin embargo, el esperar a que deje de latir tiene beneficios inimaginables. El cordón umbilical está vivo. Se construye por una arteria y dos venas, las cuales laten dentro de tu cuerpo y al nacer tu hijo- dejando de tener su vida útil- muere y deja de latir espontáneamente.
Beneficios de cortar el cordón una vez que deja de latir (unos minutos tras el parto):
– Sigue llenando de nutrientes a nuestra guagua: el cordón une a tu hiji con la placenta. La placenta es el órgano que lo protegió y alimentó durante toda la gestación. Es riquísima en nutrientes, los cuales son traspasados al momento de nacer.
– Proporciona oxigeno como un tercer pulmón: como bien sabemos, nacer es de los cambios más abruptos de nuestras vidas. Se respira por primera vez y hay una alta preocupación de que haya un buen funcionamiento del sistema respiratorio los primeros minutos de vida. Lo bueno, es que si llegase a ocurrir algo, estar con su cordón intacto les otorga un “pulmón de emergencia” y los ayuda a adaptarse mejor.
– El pinzamiento tardío del cordón aumenta las reservas de hierro y eso disminuye el riesgo de anemia luego de unos meses, en niños nacidos a término y prematuros. Asi que cuando vemos niños con anemia al año y le echan la culpa a la lactancia, debemos preguntar si el que cortó el cordón tenia mucha prisa.
– Traspasa sangre que le pertenece: al nacer, 1/3 de la sangre que le pertenece a tu guagua, sigue aún en su placenta. Si se corta inmediatamente, esta sangre puede terminar en la basura (si no pides llevarte la placenta a tu casa). ¿Dejarías que le sacaran 1/3 de su sangre solo con el fin de botarla? Suena absurdo.
Como ya se dijo anteriormente, no es de vida o muerte, pero no tiene mayor sentido ni necesidad el cortar el cordón hasta que no deje de latir. Salvo estar apurados.
Hay muchos nutrientes que le pertenecen a nuestra guagua, démosle el tiempo que los absorban. Además, al córtalo una vez que deja de latir permite que nuestro hijo no sienta tan abrupto el cambio al ambiente nuevo y no le duele el corte si este ha dejado de latir.
María Jesús Leturia I.
Doula
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