Cuando algo ha terminado, un trabajo, una relación, tu antigua rutina, no compartir con tus familiares y amigos, básicamente algo que haya ayudado a definir quién eres, te sientes triste, angustiado y desamparado. Si bien es normal pasar por esas emociones, también está en ti aprender a soltar, a dejar ir, ya que así es la naturaleza y la vida; estamos llenos de cambios, de transformaciones y debes aceptarlo.
Soltar te ayuda a crecer, a conectar con tu esencia, ese ser espiritual que habita dentro de ti, a sentir más bienestar porque ya no “tienes que hacer nada”, grandes esfuerzos para que eso que no funcionaba más siga existiendo.
A los seres humanos nos cuesta muchísimo más soltar. ¿Por qué? Porque tenemos un ego, que habla a través de nuestra mente y siente miedo.
El ego es el yo, es decir, un falso concepto de identidad. Es un mecanismo de defensa, una máscara con la que estamos identificados. Es el “personaje” que hemos creado para protegernos de la experiencia física.
Como la misión del ego es cuidarte, protegerte, no quiere que salgas de tu zona de confort, aunque ya no sea nada confortable. Debes saber que el ciclo de la vida es nacimiento, desarrollo y muerte. Todo tiene un tiempo, pero muchas veces nos quedamos atascadas en lugares, con personas, en situaciones, mucho más tiempo del que es saludable para nosotras, por miedo.
Es importante en estos momentos de crisis que pidas ayuda. Cuéntale a alguien de tu confianza lo que estás viviendo, saca tus miedo fuera de ti, verbalízalo y verás que te dará más perspectiva.
Permítete sentir tristeza, por lo que ya no fue y no será, pero sin tratar de retenerlo, ten fé que algo más grande te espera, hay nuevas dimensiones que descubrirás.
Dejar de quejarte y abrumarte, es importante, porque eso es retener. Soltar implica, dejar la resistencia del ego, que pelea para no hacerlo.
No es fácil, lo sé, yo estoy en lo mismo. Soltar el control, soltar la limpieza de casa, la rutina, trabajar tranquila, soltar que no puedes controlar nada, sólo puedes procurar estar bien, cuidarte, amarte y aceptarte así, tal cual, con defectos y virtudes, te permitirá soltar.
Es tiempo de soltar, esta pandemia nos trae eso.
Pili Valencia