Hoy decimos adiós a Chespirito (Roberto Gómez Bolaños), un hombre que durante cerca de 4 décadas dedicó su trabajo a los más pequeños, los cuales hoy como adultos te agradecemos por toda una carrera dedicada al humor sano y mensaje positivo.
Chespirito no sólo fue actor, sino también escritor, guinista, compositor, director y productor. Probablemente sus personajes más recordados son El Chavo del 8 y el Chapulin Colorado, pero también encarnó a otros personajes entrañables, como El Doctor Chapatín, el Chómpiras, Vicente Chambón y Chaparrón Bonaparte.
Sin lugar a dudas mi favorito es El Chavo del 8 (al igual que muchos), un niño que vive en una vecindad mexicana en la cual vive sus travesuras junto a otros niños. Si bien el personaje desde un comienzo fue pensado para el público adulto y actuado por niños personificando adultos, su temática y situaciones universales son fácilmente identificables para todo el mundo, lo que le dio rápidamente mucha popularidad no sólo entre los adultos, sino que también en los niños.
Un dato curioso que supe de adulto, es que “el Chavo” no vivía en un barril, sino que en realidad vivía en la casa 8 de la vecindad.
Roberto, te doy las gracias por tu carrera, se por tu biografía que tu vida no fue perfecta, que los personajes que creaste no eran perfectos y que tus guiones a veces eran un poco tontos. Pero no me importa, me acompañaste muchas tardes de mi infancia, me mostraste a un grupo de adultos vestidos de niños que me hicieron reír y me mostraste todo el la vida deja una enseñanza.
También me mostraste que los super héroes no son como Superman, sino que pueden ser personas de carne y hueso, débiles y cobardes como el Chapulín Colorado, el más humano de todos los héroes de la televisión.
Otro dato curioso es que el Chapulín Colorado tiene un primo que es un ex ladrón llamado Chómpiras. También me enseñaste que los delincuentes se pueden rehabilitar, el Chómpiras luego de ser ladrón consiguió trabajo como botones en un hotel (se convenció de ser una persona honrada luego de “ver un capítulo” del Chavo del 8).
Por todos esos momentos y muchos otros más te recordaré por siempre.
Para finalizar, comparto el último capítulo del Chapulín Colorado.
¡Gracias Chespirito!
Juan Eduardo Donoso