34 semanas de embarazo – ¿Qué son las contracciones?

Estoy en Reposo Relativo, me siento castigada.

Una de las cosas que más me cuesta es el reposo en casa. La verdad es que soy una persona inquieta y el hecho de tener que guardar calma y movimientos me deja de mal humor. Sin embargo este esfuerzo de lograrlo se debe a los síntomas de parto prematuro de la semana anterior. La verdad es que me preocupé y me lo estoy tomando seriamente. Uso el tiempo para escribir en el blog, en algunas columnas que tengo en diarios y revistas. Hoy partí también con un proyecto secreto: voy a escribir en un libro. Digo EN un libro y no UN libro porque es un trio de personas. Haré un trio con dos grandes de las letras, pero no puedo contar más. He movido el noodle entonces (el fideo, cerebro, neuronas) y poco el cuerpo.

“Jacinta se mueve mucho” es increíble como nos rotulan desde antes de nacer. Es sin maldad, es de puro gusto de los adultos como para sentir que algo es predecible, no es de malas personas… es por buscar seguridad. El tema es que fui a urgencia otra vez para un monitoreo porque tengo el útero irritable y aparecen contracciones luego que Jacinta se mueve un rato, pero esta vez no eran contracciones de parto. Me quedé feliz, 34 semanas es muy pronto aún.

Como les contaba, ya soy la mamá de “la guagua que se mueve mucho” todos lo saben: “¿esta es la guagua que se mueve mucho verdad?” , “si, las matronas dicen que se mueve de manera impresionante”, etc. No ha nacido y ya tiene un post it. Que claramente no quiero fomentar. ¿Puede una guagua moverse mucho o poco? las guaguas se mueven lo que tienen que moverse, solo eso. Cada una como quiere. Fin.

Las contracciones uterinas son algo necesario para que el embarazo, el parto y el posparto se desarrollen con normalidad, pero ¿Qué son las contracciones?

El útero está formado por una capa de músculo especial, que se llama miometrio y que, como todos los músculos del organismo, tiene la capacidad de contraerse y relajarse, dependiendo de las necesidades de cada momento.

En el embarazo esta capa se va expandiendo para que la guagua crezca. Durante el parto, el músculo tiene que trabajar y contraerse para que la guagua salga. Y durante el posparto, tiene que volver a ser como era antes de comenzar la gestación.

A partir de la semana 25 comienzan a aparecer las contracciones de Braxton Hicks, que son muy famosas pero que nunca he sentido. Se deben a que el útero empieza a crecer más rápido. Son irregulares en frecuencia e intensidad (se supone que las de parto son regulares: cada 5 min o cada 10 min)

Después, en las últimas semanas de gestación, deberían aparecer más , y más perceptibles, y se espera que sean un poco molestas. Estas contracciones sirven para preparar el cuello del útero para la dilatación. Por suerte esto último no ha sucedido en mi cuerpo, es señal que el momento del parto ha llegado.

¿Qué se siente?
Son molestias parecidas a las de la menstruación. Son más intensas y cortas a veces, pero te duele la espalda y la cola como cuando estás en los días de menstruación. Claro que la panza se pone muy dura y cambia de forma: cuadrada, triangular, en punta. Es así. (¿Conoces los Barbapapa?: ese estilo de cambiar de forma)

Ahora, lo que me tiene inquieta es saber cuándo son de parto y cuando del Señor Braxton. Si son de Braxton me quedo tranquila, pero si es como la semana pasada, que son de parto prematuro me preocupa.

Dicen los expertos que si es el primer parto, cuando las contracciones sean cada cinco minutos y no desaparezcan al estar en reposo, es que ha llegado el momento de ir a la clínica. Si es el segundo parto, hay que esperar a que las contracciones sean cada diez minutos. Yo tuve cada 10 min y es mi segunda guagua. Aunque nunca consideré el tiempo y sí el dolor que generaban, sin duda lo más notorio.

Ojo que no siempre duelen. Incluso cada mujer las percibe distinto, depende de cuanto dolor resistamos en general. Depende también de lo relajadas que estemos, si respiramos bien o no, de la temperatura corporal, etc. Para evitar que duela tanto lo que he hecho es moverme, respirar profundo, tomar duchas con agua tibia. Hasta ahora esto ha dado resultado.

Las contracciones no acaban con el parto
Es necesario que haya contracciones para que la placenta pueda desprenderse y salir. En los días posteriores al parto, hay contracciones (llamadas entuertos) que sirven para que el útero recupere su tamaño normal y no existan hemorragias. De hecho el útero se contrae al dar pecho a la guagua promoviendo que el útero vuelva a su posición original. Otra razón más para promover la Lactancia materna.

A propósito de Lactancia Materna, y que estamos en la semana de la Lactancia Materna, puedo contarte con respecto a los productos que he encontrado para esta etapa, que encontré sostén de lactancia muy lindos y cómodos en MEDELA.

Mi favorito es el Modelo Confetti que viene en varios colores. Compré varios para poder usar en la clínica y después durante la lactancia en casa. Es necesario sentirse cómoda y me gusta la suavidad y las telas livianas. Me he puesto algo mañosa, creo: es que estoy embarazada, no me juzgues.

En mi visita a MEDELA me abastecí de PURELAN para evitar las grietas durante la lactancia, como es solo lanolina la Jacinta podrá chupar sin problemas y no tendré que sacar la crema del pecho cada vez. Es la misma crema que usé hace 8 años (con Emilia), pero por suerte ahora la trae MEDELA (hace 8 años había que comprarla en EEUU).

Si quieres ir al Showroom de MEDELA la dirección es: Pérez Valenzuela Nº 1680, Providencia
Santiago, Chile.
También puedes escribir a contacto@medela.cl

Varinia